El alza de precios mundiales ha venido generando inconvenientes en varios países. Una de las mayores sorpresas es la inflación que ha tenido Dubái en estos últimos meses producto de la situación de conflicto entre Rusia y Ucrania. La ciudad de Emiratos Árabes Unidos debe importar todos sus productos alimenticios y eso ha generado un aumento inesperado.
Pese a ser una ciudad rica en el emirato ubicado en el Golfo, se encuentran muchos migrantes pobres, que van por algún tipo de trabajo. Ante esta situación, se han instalado distribuidores gratuitos de pan para las personas que lo necesitan. Los mismos, un total de diez, se utilizan con un lector de tarjetas de crédito sin costo alguno.
Los alimentos han tenido un aumento de casi un 10 por ciento durante el mes de julio. En tanto, el transporte ha tenido un incremento anual cercano al 40 por ciento. Las máquinas dispensadoras permiten a las personas que los necesiten obtener un paquete de cuatro panecillos calientes.
Fuente: Telenoche – El Observador
