Tener a mano ingredientes simples permite improvisar comidas rápidas. Es recomendable contar con pechugas de pollo y filetes de pescado congelados, así como verduras, frutas y frijoles enlatados.
De igual manera:
- Las tiendas ofrecen una variedad de productos ya cortados y listos para usar, como verduras envasadas y frutas frescas. Estos alimentos facilitan la preparación de ensaladas, sopas y guisos, ahorrando tiempo y esfuerzo.
- Utilizar ingredientes preparados como base es una excelente manera de simplificar la cocina. Por ejemplo, una masa de pizza precocida con salsa de tomate y verduras frescas permite disfrutar de una pizza más saludable en minutos. Asimismo, combinar caldo de pollo con verduras congeladas y arroz crea una sopa deliciosa rápidamente.
Fuente: Cigna