El multimillonario ruso, Roman Abramovich, que había intentado mediar con negociadores ucranianos, viene sufriendo síntomas de un posible “envenenamiento”. Esta información, según medios estadounidenses, es un intento de boicotear posibles acercamientos entre las partes.

Los síntomas que presentó el propietario del club de fútbol Chelsea, que deberá venderlo por las restricciones que Inglaterra puso a los dueños rusos, son ojos llorosos y enrojecidos. También hubo una descamación en la cara y manos, pero luego hubo una mejoría, dejando en claro que su vida no está en riesgo.
Mykhailo Podolyak, asesor del presidente ucraniano Volodímir Zelenski, confirmó la situación y aconsejó que se haga un seguimiento del tema únicamente con los canales oficiales. Para el asesor de Zelenski están creciendo las especulaciones y las teorías conspirativas.
Fuente: Telemundo – El Observador – El País