Un efectivo de la Guardia Republicana, que había pasado en comisión al Parlamento, fue detenido en el marco de una investigación por tráfico ilegal de armas. El imputado era chofer de la diputada por el Frente Amplio, Susana Pereyra, esposa del exministro del Interior y actual senador Eduardo Bonomi.
Cristina Falcomer, la fiscal del caso, informó en rueda de prensa que en la vivienda del detenido había granadas de fuego y de humo, además de muchas partes de armas. Falcomer espera la confirmación que el efectivo de la Guardia Republicana habría recibido cuatro encomiendas desde Estados Unidos.
Esta situación permite inferir que otras personas están involucradas, dado que el máximo de encomiendas a recibir desde el extranjero son tres. La defensa del imputado alegó que la compra de estas armas eran por motivos de colección. Sin embargo, el efectivo no se encuentra inscripto en el registro de comercio o de colección de armas.