Una oleada de robos a comerciantes minoristas, en San Francisco a plena luz del día, ha generado pérdidas millonarias con la renuencia de la izquierda norteamericana. Videos e imágenes en las redes sociales son evidencias de escenas de robos que no son luego denunciadas por los empleados.
A causa de los cotidianos robos minoristas en la ciudad del estado de California, muchos comercios cerraron sus puertas o acotaron el horario de atención. La viralización de estos hechos, que empiezan a replicarse en otros estados norteamericanos, donde se capturan videos de grupos de ladrones saliendo de las tiendas.
La Proposición 47 establece que aquellos hurtos de mercadería por un valor menor a 950 dólares no serán penalizados. A esto se suma un cambio en la ley penal, propiciado por la izquierda, que redujo la categorización de los ‘delitos menores’ a la denominación de ‘robos no violentos’.
Dentro de las particularidades que se vienen dando, y es destacada por los comerciantes, es que no roban artículos para sobrevivir. Mucha de la mercadería robada luego puede verse en las calles siendo vendida por los ladrones.