El presidente de Rusia denunció una guerra económica desde Washington. Uno de los temores es que las empresas occidentales decidan emprender una oleada de despidos masivos. Los embargos sobre el petróleo y el gas se suma a otras sanciones de los países que vienen moviéndose en bloque contra el gobierno ruso.
El Reino Unido viene promoviendo al G7 que se sume a las sanciones económicas sobre los hidrocarburos. Europa aún está reticente a promover el embargo de las importaciones desde Rusia. El temor para el gobierno de Putin es la decisión de cierre o una serie de despidos masivos en las fábricas del país.
El Mar Negro cuenta con una situación de barcos varados como no se daba desde la década del 70, cuando hubo recorte de petróleo de la OPEP. Los expertos, en el mundo de los cereales, esperan una inflación mundial por la merma en el suministro de muchas materias primas de primera necesidad.
Fuente: Telemundo – El Observador – Telenoche