El Centro de Educación Secundaria (CES) viene estableciendo un régimen de permisividad a los alumnos con el fin aparente de enmascarar el menor rendimiento académico de los mismos. La normativa impuesta para secundaria indica que si el alumno aprueba el último parcial del año, sin importar el resto del período, debe aprobar el curso.
Actualmente, según aseguran docentes con los que Despiertamedia ha tenido contacto, el CES viene buscando que la única causa de repetición sea por faltas. En cuanto a materias, el organismo rector de secundaria viene promoviendo que se ‘dibuje’ la nota en aquella materia que es plausible de efectuarse y de esta manera permitirle al estudiante que no pierda el año por contar con una cantidad de materias bajas que lo obligue a la repetición.
Contraste entre secundaria y la UTU
Mientras, según los docentes, la Universidad del Trabajo del Uruguay (UTU) sigue en franco ascenso en comparación con el CES, al menos en cuanto a manejos generales y organización. Esta situación ha generado que los educadores se inclinen por UTU, aunque deban tomar unas horas en Secundaria. Otra queja que comparten es que desde el CES «la presión por maquillar el bajo rendimiento académico de los estudiantes es constante».
Los grupos de secundaria en contraste con la UTU son más numerosos y en los nocturnos, alegan los docentes que muchos adultos que concurren lo hacen «sin ganas de aprender». Otro reclamo de los docentes es respecto al pago de las horas trabajadas, entorno a lo que las quejas por la desorganización imperante en el organismo estatal han aumentado.