Expertos afirman que la música clásica calma a los bebés y estimula su frecuencia cardíaca.
La más recomendada son las composiciones de Mozart y Bach. Se puede poner música al bebé a partir del quinto mes de embarazo. En esta etapa ya se ha desarrollado el sentido del oído de tu bebé.
Puedes reproducirla en una habitación con un volumen medio o muy cerca de tu vientre. La idea es que la música y su volumen sean relajantes tanto para la madre como para el bebé.
FUENTES: EL ESPAÑOL