Con el “encierro” familiar a causa de la pandemia, las denuncias falsas de abuso sexual de parte de padres a sus propios hijos han crecido exponencialmente. Las absoluciones y revocaciones de sentencias también se han planteado como una tónica en estos últimos días.
Un ejemplo de esta problemática es un caso sucedido en Italia, donde un padre sentenciado a seis años y tres meses de prisión, ante la presunción de abuso sexual a la hija de su pareja, terminó con la absolución del denunciado tras constatarse la falsedad de la misma.
El punto inicial estuvo en una informe de la maestra a servicios sociales por palabras de la menor. A partir de allí fue un calvario que terminó con la condena y hasta la prohibición de acceder a cargos públicos y abonar una indemnización.
La posterior absolución es una muestra más de la falta de veracidad en los trabajos realizados por la justicia y el crecimiento constante de las denuncias falsas de parte de madres, asistentes sociales y maestras, sin abordar la verdadera problemática que pueda estar pasando la menor.
Fuente: FanPage