Tras 18 días de manifestaciones, el gobierno de Ecuador consiguió un acuerdo de paz con los líderes indígenas. La firma de un acta puso fin a casi tres semanas de protestas violentas en territorio ecuatoriano.

El presidente Guillermo Lasso estuvo en el centro de la situación cuando se llegó a debatir la destitución del mandatario. En Quito se firmó el acuerdo que tuvo la intervención, como mediadora, de la Iglesia Católica. El alto costo de vida fue el eje de las protestas de los grupos indígenas que generaron las movilizaciones.
El documento establece el “cese de las movilizaciones” y el regreso de los manifestantes a su territorio. Leonidas Iza, presidente de la poderosa Confederación de Nacionalidad Indígenas (Conaie), fue el firmante por parte de aquellos que protestaban. También se comprometían a terminar con los bloqueos de las carreteras de nivel nacional. Lasso, con 13 meses en el gobierno, debió enfrentar una dura crisis política.
Fuente: Telemundo – Telenoche – El País – El Observador