En las primeras horas de la jornada del martes una veintena de personas resultaron baleadas en una estación de metro en Brooklyn. Los bomberos encontraron varios dispositivos sin detonar. El atacante no ha sido completamente identificado y se viene ofreciendo recompensa por datos que ayuden a dar con el mismo.
Los viajeros del metro señalaron a un varón afroamericano como la persona que, tras lanzar bombas de humo, empezó el tiroteo dentro del vagón. Todavía se desconocen las circunstancias del ataque. El sospechoso se dio a la fuga pese a un importante dispositivo que se dispuso en los alrededores de la estación de la calle 36.
Sobre el sospechoso, tras la descripción de los testigos, sería un hombre de 1,65 metros de altura y 80 kg de peso; sin embargo, se carece de información oficial. Las redes sociales se inundaron de imágenes y el temor de atentados terroristas volvió a sobrevolar sobre la sociedad neoyorkina.