El tenista número uno del mundo, Novak Djokovic, presentó un comunicado donde dejó en claro que se encuentra “muy decepcionado”. El serbio estuvo once días en Australia y, finalmente, fue deportado al entender la justicia australiana que era “un riesgo para la salud”. Esta consideración judicial resultó por no encontrarse vacunado contra el covid-19.
El tenista de 34 años, ganador de las últimas tres ediciones del Abierto de Australia, no podrá iniciar el presente torneo tras la decisión tomada por los tres jueces del tribunal. Djokovic abandonó el país luego de más de diez días en la ciudad de Melbourne. El serbio planteó que se tomará “un tiempo para descansar y recuperarme”.
El tribunal australiano apuntó a que el tenista promovía el “sentimiento antivacunas” y hasta promover los disturbios civiles. Esta decisión de vida del número uno del tenis le podría afectar su carrera. El venidero Grand Slam de Roland Garros, en suelo parisino, también contará con la obligatoriedad del pase sanitario.
Fuente: Telemundo – El Observador – El País
