Desde el fuero íntimo de la izquierda estadounidense más férrea, que espera acceder al poder en caso de confirmarse el triunfo de Joe Biden, ya se encuentra en marcha un plan macabro de purgas y “listas negras” contra los votantes de derecha que promovieron la agenda de Donald Trump.
El denominado “Proyecto de responsabilidad de Trump” ha realizado una recopilación de datos de aquellas personas vinculadas al mandatario republicano y su administración. La idea, casi al estilo soviético de las primeras décadas del siglo pasado, es castigar a quienes apoyaron a Trump con diferentes recriminaciones sociales.
La persecución a la administración Trump tendrá una extensión a los medios de prensa y votantes identificados con el presidente republicano estadounidense. Las purgas y castigos prometidos pueden llegar a alcanzar a las familias apuntando desde el escarnio social hasta las dificultades de conseguir un empleo remunerado.
El uso de tácticas comunistas soviéticas, en pleno siglo XXI, no hacen más que pensar en una venidera cacería de brujas si Joe Biden accede a la Casa Blanca. Vivenciar, en este nuevo milenio, lo mismo que ocurrió detrás de la denominada “cortina de hierro” en plena Guerra Fría es solo una muestra del odio con el que llegan o pretenden acceder al poder.
Fuente: The Federalist