En primer lugar, utiliza un jabón suave que no reseque la piel para limpiarla suavemente. Evita frotar la piel repetidamente y lávate una o dos veces al día, especialmente después del ejercicio.

De igual manera:
- Emplea productos con ácido salicílico o peróxido de benzoilo para lavar la piel, especialmente si es propensa al acné. Asegúrate de retirar completamente cualquier suciedad o maquillaje.
- Opta por usar productos no comedogénicos y evita el maquillaje durante la noche.
- Utiliza cremas humectantes o hidratantes a base de agua que sean seguras para uso facial y no obstruyan los poros.
- No te toques la cara ni te rasques los granos, ya que esto puede causar infecciones e incluso cicatrices.
FUENTE: MedlinePlus