Para realizar este proceso de manera correcta necesitarás: un poco de resina, papel contact autoadhesivo, un recipiente de agua, jabón de cualquier tipo, y un paño seco.
- En primer lugar, limpia perfectamente el cristal con agua y jabón.
- Aplica resina en la grieta hasta cubrirla por completo.
- Lubre la resina con el papel contact
- Deja secar el producto por completo
- Retira con cuidado el papel contact y limpia el espejo con un paño.
- También puedes aprovechar dicha grieta, dependiendo de donde esté ubicada para añadir otros elementos decorativos a tu espejo y conseguir que dicha imperfección sea parte del diseño del mismo.
FUENTE: Consumer