El directorio de UTE -Administración Nacional de Usinas y Trasmisiones Eléctricas-, determinó que no se retomará la difusión y formación en “lenguaje inclusivo”. Los integrantes de los partidos de coalición de gobierno impulsaron esta modificación que tenía como base una fuerte política de ideología de género.
Desde el año 2009, la empresa pública de energía eléctrica se había alineado a impulsar la equidad de género. Como parte de esa “tarea” se promovía la difusión del lenguaje inclusivo mediante formaciones a los empleados.
Desde el Frente Amplio, tanto desde su representante en el directorio de UTE, María Fernanda Cardona, como de sus adeptos, se ha venido levantando la bandera de los derechos adquiridos.
Las redes sociales han mostrado, con beneplácito, esta decisión del ente público. El aprendizaje de un lenguaje más universal y verdaderamente inclusivo, como el “lenguaje de señas”, fue la mirada del público que criticó el mal uso de los dineros públicos en gobiernos anteriores.
Fuente: @fercardona1234(Twitter.com)